Dr. Norman Minars: 35 años en Dermatología
Este año, el Dr. Norman Minars, MD celebra 35 años de servir en Hollywood. El hombre detrás del éxito de Minars Dermatología, el Dr.Minars, no siempre supo que estaba destinado a una carrera en esta rama de la medicina especializada. Al celebrar los últimos 35 años como médico, miramos hacia atrás en la forma en que hizo su camino…
Norman Minars creció en Queens, Nueva York. Cuando era un hombre joven, era la intención de su familia de que entrara en el negocio familiar. Su padre había establecido una empresa de fabricación de colchones con sus hermanos. Abrieron una fábrica después de la Segunda Guerra Mundial en el Barrio East Harlem, también conocido como “Harlem Español”, en Manhattan, en la ciudad de Nueva York. Norman recuerda haber ido con su padre en el auto familiar, cuando era niño: “Si pasábamos, y había un colchón viejo que alguien había puesto en la acera, mi padre lo ponía en el coche, lo llevaba a la fábrica para reacondicionarlo, para su posterior venta.” Pero el Dr. Minars “tenía otros planes para su vida”.
“Nunca tuve ningún deseo de hacer las camas”, admite el Dr. Minars, nacido en 1946. “Quería ser veterinario. Así que pasé algún tiempo en una granja, que era un pre-requisito para la escuela de veterinaria, pero me encontré con que tenía demasiadas alergias. Seguí con estornudos y sibilancias debido a todas las plantas y árboles, así que me di por vencido”.
Sin inmutarse y todavía con ganas de seguir con su amor por la medicina, el Dr. Minars decidió convertirse en médico. Comenzó en la Escuela de Medicina George Washington en 1967, y después de completar los fundamentos, comenzó su rotación médica, aún no decidido sobre cuál era la especialidad que más le interesaba. Entonces conoció a su mentor, el Dr. George Elgart, que le iba a introducir al conocimiento de casos interesantes de dermatología en las salas de los hospitales. “A partir de ese momento, me quedé enganchado.”
Instalando su propio Consultorio
El Dr. Minars se graduó en la Escuela de Medicina, a continuación, hizo una pasantía de un año en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA, por sus siglas en inglés). Pasó tres años estudiando dermatología en la Facultad de Medicina de Virginia en Richmond. Instaló su propia práctica en Hollywood, FL, en la calle Washington en junio de 1975, con sólo una secretaria para ayudar.
| DATOS CURIOSOS | ||||
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Originalmente, su interés era la cirugía de cáncer de piel, y tiene, literalmente, miles de fotos de las operaciones que realizó. De hecho, él siempre amó la cirugía, la fotografía y los animales. Después de instalar su propia práctica en dermatología, el veterinario que había en él, hizo que continuara con su afición de la crianza de conejillos de Indias, y una vez, incluso, llevó a cabo una operación en una hembra que tardaba en dar a luz.
“Tenía que hacer una operación en el consultorio para tratar de salvar el conejillo de Indias y su camada, con el veterinario todo el tiempo hablándome en el teléfono”, recuerda el Dr. Minars. “Hice una cesárea, pero los bebés ya estaban muertos.”
Los conejillos de indias no eran sus únicos animales domésticos. Su hijo, el Dr. Todd Minars, recuerda los conejos en el porche, una cacatúa en la cocina, y los perros, peces y gatos. El Dr. Minars no era solamente un veterinario aficionado, sino también un botánico aficionado. En un momento dado él cultivaba una variedad de plantas en el porche utilizando una luz ultravioleta en un invernadero improvisado.
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El Dr. Minars también se imagina a sí mismo un panadero aficionado (muy aficionado), y probablemente su más larga manía hasta la fecha, y uno que viene muy bien en la especialidad, tales como dermatología visual, es la fotografía. Toma fotos de todo. Él ha estado fotografiando la piel desde los tiempos que cursaba su residencia y algunas de estas fotos están ahora publicadas como parte de un Atlas de Dermatología Web.
El fotógrafo se convierte en un tecnófilo:
En septiembre de 1980, pocos años después de la apertura de su Consultorio de la calle Washington, el Dr. Minars se trasladó a su ubicación actual en la calle Sheridan, lo que le ayudó a servir de mejor manera a su creciente número de pacientes.
Aunque el Dr. Minars había establecido sus oficinas con sólo una secretaria, se pudo determinar claramente la necesidad de contar con ayuda adicional una vez que su práctica había comenzado a crecer, lo que sucedió a pasos agigantados. Durante los siguientes 20 años, Minars Dermatology operó con un médico, dos empleados de tiempo completo y un tercero a tiempo parcial.
A finales de los años 80 el ordenador personal fue inventado y el Dr. Minars, como de costumbre, fue uno de los primeros en obtener uno.
Su primer ordenador real fue el Apple II (que tenía una pantalla verde, disquetes, y sin disco duro). Sin dejarse intimidar por la tecnología primitiva, el Dr. Minars estuvo en internet antes que estuviera Google o AOL o incluso algún navegador de Internet. Utilizó CompuServe (CIS, por sus siglas en inglés) para ingresar en la red cuando solo tenía tablones de anuncios.
En 1992, el Dr. Minars había instalado ordenadores en su oficina, para sustituir la forma de mantener los registros de los pacientes. Antes de este cambio, todo estaba escrito en libros de contabilidad, y el personal utilizaba las máquinas de escribir eléctricas para registrar toda la información importante. Después de que se instalaran computadoras, continuó escribiendo notas en las historias clínicas de los pacientes en forma manuscrita, pero con el tiempo todo fue transferido a las computadoras para su mejor resguardo.
Curiosamente, comenzó la construcción de su primer sitio web de su práctica médica: www.MinarsDermatology.com a fines del año 1997 – el año en que los fundadores de “Google” encontraron un nombre para su nuevo motor de búsqueda.
Un Gurú del láser:
Siempre, para mantenerse al día con los últimos avances de la tecnología, el Dr. Minars trató de actualizar su oficina de otras maneras. Comenzó a usar láseres tan pronto como se introdujeron para su uso en dermatología – inicialmente, alquiló uno cada pocas semanas, según fuera necesario, hasta que se compró su primer láser en el 2000.
No es de extrañar que hoy en día, el Dr. Minars tenga más experiencia con láseres que la mayoría de los dermatólogos.
Su más reciente interés es en la tecnología del CO2 fraccional, un tipo de láser que ha estado utilizando desde que fue introducido por primera vez. Ha tratado a cientos de pacientes con varias marcas y versiones de estos tipos de láser, y ha completado un estudio de investigación que examina los diferentes efectos que los parámetros de los distintos láser tienen en la piel, así como las diferencias entre las distintas marcas de láser de CO2 fraccional.
“Es difícil imaginar cómo logramos sobrevivir sin los láseres”, dice el Dr. Minars.
De tal palo, tal astilla
En 2002 el hijo del Dr. Minars, Todd Minars, MD se unió a la práctica como el segundo dermatólogo.
Desde entonces, el Dr. Lesley Clark-Loeser, un amigo de la infancia del Dr. Todd Minars, también se ha unido a la práctica, brindando su capacidad o “expertise” en lesiones pigmentadas y el melanoma. Marianna Blyumin-Karasik, MD, fue el cuarto médico, que se unió en 2009. No sólo tienen más médicos que se han unido a la práctica, sino el equipo en general ha crecido también. En este momento hay 11 miembros que componen el personal de asistencia, para los muchos pacientes que se ven en los consultorios todos los días.
La “mano derecha” del Dr. Minars:
Durante muchos años, se podía oír a alguien gritar: “ ¡Jean!” . Sucedía aproximadamente cada cinco minutos por los pasillos de Minars Dermatology. Jean Condina fue contratada como secretaria en 1979. Se quedó con Minars Dermatology por más de 27 años, llegando a ser la Gerente del Consultorio. Lo hizo todo, desde la asistencia en las cirugías, hasta determinar la mayor parte de las contrataciones y los despidos y la gestión de los libros.
Jean conocía a todos y cada uno de los pacientes, y todos ellos la conocían. Tenía un espíritu increíble, y fue apreciada por todos. Ella era una parte importante del éxito del Dr. Minars y trabajó, incluso atravesando una enfermedad, hasta que falleció en 2007.
Durante los últimos años de su vida, Jean tuvo el placer de contratar y trabajar con su hija Carol, que es ahora la actual administradora de las oficinas en Minars Dermatology (si usted no sabe quién es ella, es la alta, rubia… ¡y que habla mucho!).
Carol y Jean
Venir de lejos
Así como Minars Dermatology comienza a mirar hacia el futuro, el Dr. Minars también tiene una mirada hacia el pasado. “En sus principios, la especialidad en dermatología era puramente médica; se trataba erupciones cutáneas y acné”, dice.
“Ahora se ha convertido en procedimientos quirúrgicos, tratamientos cosméticos para las arrugas y líneas finas, y los tratamientos con láser para todo tipo de imperfecciones y condiciones, tanto médicas como cosméticas.”
“Nuevos medicamentos están disponibles como nunca tuvimos antes para la psoriasis, por ejemplo, y tenemos medicamentos mucho mejores y más eficaces para otras enfermedades también.”
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