La Rosácea es un trastorno crónico y progresivo de la piel que afecta a 14 millones de estadounidenses. El problema suele comenzar con un ocasional enrojecimiento de la nariz muy leve, que luego se hace persistente, abarcando también las mejillas, la frente o la barbilla. Espinillas emergentes y pequeños vasos sanguíneos pueden hacerse visibles, y la piel puede convertirse en extremadamente seca. Aunque la Rosácea no es peligrosa para la vida, es muy a menudo, tanto psicológicamente como socialmente, muy devastadora.
Aunque los orígenes de la rosácea aún no se han determinado, factores que la componen son bien conocidos: en el sur de la Florida, el sol es un desencadenante importante, seguido por el estrés, el calor, el alcohol, las comidas picantes, práctica de ejercicios, baños de agua caliente, condiciones de tiempo frío, bebidas calientes, y los productos para la piel. Además de los condimentos muy picantes, alimentos que pueden desencadenar este proceso puede incluir: chocolate, yogur, tomate, carnes adobadas, salsa de soja y vinagre.
¿Cómo puedo tratar los “Granos y Espinillas” de la Rosácea?
Las protuberancias rojas y “granos” (pústulas) de la rosácea responden de manera predecible a los medicamentos de venta con receta. Es un tratamiento, NO una cura. Algunas personas permanecen usando estos medicamentos durante años, mientras que otros puede completar un ciclo y luego continuar en función de los brotes de acné. Sin embargo, los medicamentos no eliminan la tonalidad de los capilares rotos y el enrojecimiento que provoca la Rosácea, para ello, necesitamos la terapia con láser.
¿Cómo puedo tratar el Persistente Enrojecimiento y los Vasos Sanguíneos Rotos?
La Rosácea es una enfermedad de los vasos sanguíneos en la cara, y la terapia con láser es el único tratamiento que se ocupa de estos vasos sanguíneos. El láser permitirá que su cara esté “menos roja” al borrar los capilares rotos. Lo más importante, sin embargo, es que la terapia con láser cambia el curso de la enfermedad: la frecuencia de los brotes disminuirá, y se podrá depender menos de cremas y píldoras. El láser es indoloro y no provoca “tiempos muertos” (puede ser tratado durante la hora del almuerzo y volver inmediatamente al trabajo). Casi todos los pacientes con rosácea podrían beneficiarse del láser, pero las compañías de seguros no van a pagar por ello.